AMPARO FERNANDEZ

LA NIÑA Y SUS DESEOS (SEGUNDA PARTE)

La niña que pidió un deseo

miró el umbral

de que no vio ninguna estrella fugaz

reía , muchas veces

y se puso a pensar

que para que pedir un deseo

si en mi alrededor abarco

los años que me han hecho sembrar

esa gran amistad que tengo

que cuido y riego cada vez mas.

1 comentario:

Vicent Llémena i Jambet dijo...

La niña se para en la amistad ¡como tiene que ser! la ambición es algo que tiene que ver con el goce, con el dolor, y con el placer, es algo a lo que hemos de llegar, pero que si centramos nuestra vida en ello nos lleva por caminos tortuosos, la niña ha de conformarse con lo que es, con existir como existe y ir avanzando o mejor, para no poner lo más ni lo menos, ir caminando.

Muy bueno.