fotografias del carnaval de Venecia marzo 2011 por toni youani

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3 comentarios:

Eduardo dijo...

Muy buenas las fotos...parece que estamos todos uy animados con el blog...le estamos dando mucha caña..yo les he dado la direccion a un monton de gente..hermanas , familia..amigos mios y de Luis..parece que esta sirviendo otra vez como un vinculo importante..aunque lo de las reuniones siga un poco abandonado...creo que Vicent me ha servido de ejemplo...esta en todo..no hay articulo que se le escape y creo que los comentarios de todos son tambien muy aclaratorios...me esta reconfortando y me esta ayudando ha desacer algunos fantasmas.quiza una necesidad del otro que tengo muy enturbiada...espero que todos sigamos así.Un beso

Vicent Llémena i Jambet dijo...

Son fotografías maravillosas llenas como ya te dije de sensualidad, la chica que va sin máscara o las dos mujeres o el puente que una vez retocado por ti parece un cuadro al óleo, maravillosas.
Me hacen revivir la primavera que ya ha pasado pero que indudablemente volverá y si no al año siguiente, en la inmensidad del tiempo y del espacio.
Sensualidad, es la palabra.

Vicent Llémena i Jambet dijo...

Claro que hemos de darnos un empujón, Eduardo, y cada día, y estimarnos como amigos más allá del just do it o del enjoy o del goce exacerbado, y lo de narcisismo no, no es eso, yo también pretendo ser reconocido, es cuando estamos en el discurso del analista que esperamos el reconocimiento del otro o del Otro, si no ¿en qué íbamos a sostenernos? ya se que muchos creéis en Dios y otros no, pero los discursos están ahí a parte de la espiritualidad tan necesaria también. Y el del analista busca eso, el ser reconocido, como lo busca cualquier psicoanalista para con su paciente. Sigamos así Eduardo y no nos dejemos engañar por los sentimientos, hemos de ponerles palabras y darles lugar, mira, dice el psicoanálisis hablando del conductismo, que no es malo, no obstante, que lo que sale por la puerta entra por la ventana, no hemos de eliminar el síntoma sino darle un lugar, el síntoma somos nosotros mismos, nuestra alma.

Un beso Eduardo y espero haberte tranquilizado un poco en tus pensamientos.
Y seguimos escribiendo eh ;-)